Niño de mil aceras
Hoy mire a un pequeño en la calle,
estaba durmiendo en un rincon de acera,
tan solo lo cubria el frio de la indiferencia
de los que al pasar de prisa, ni a mirar voltean.
Hoy nacera un hermoso niño,
y yo, que estoy aqui, en sala de espera,
recuerdo a aquel otro que dormia en la acera,
recuerdo su rostro de angel perfecto,
recuerdo su piel vacia de afectos.
Hay tantos pequeños durmiendo en aceras,
frutos del deseo y de la ignorancia,
hijos del dolor, envuelto en quimeras,
niños que la vida tiro a la vagancia.